Uruguay se encuentra en la misma latitud que la cuenca Mediterránea, el área principal de producción de oliva en el mundo. El clima de Uruguay es similar al del Mediterráneo con inviernos suaves, primaveras y otoños lluviosos y veranos cálidos y secos. Hoy, con más de 6000 hectáreas plantadas y un mercado interno que no sobrepasa el millón y medio de litros de aceite por año, la plantación de olivos en Uruguay resulta una apuesta muy prometedora para los inversores con la mira puesta en la exportación.
Valeria Bonanno y Alejandro Bengolea descubrieron un enclave mágico en el Valle Edén y fueron cautivados por la serena belleza del lugar. Antes se habían dedicado durante 20 años a su empresa familiar en el ramo de la construcción hasta venderla, para luego desarrollar proyectos personales como el hotel boutique Hub Porteño, en la Recoleta, Buenos Aires. Luego nació Lote 8, un emprendimiento realizado con la más alta tecnología para lograr un producto de excelencia: aceites de oliva extra virgen de alta gama.
Olivos en Valle Edén, Uruguay.
Lote 8 ubicado en Valle Edén, un lugar agreste al noroeste de Punta del Este, más allá de la Barra y José Ignacio. Sus múltiples cañadas naturales con muy buena agua aportan la ventaja de permitir plantaciones de olivos en las pendientes en este paisaje ondulado. Los olivos crecen a una velocidad similar a los de la cuenca Mediterránea.
La historia del olivar nace en los emigrantes europeos que trajeron olivos de sus regiones de origen para luego plantarlos y cuidarlos hasta aclimatarlos a esta tierra nueva. Hoy en día, en Uruguay se cultivan las variedades Frantoio, Arbechina, Leccino, Manzanilla, Taggiasca, Pendolino y Moraiolo.
Las variedades que Lote 8 produce son: Arbechina, Frantoio, Leccino, Coralina, Picual, Barnea y Picholine. La cosecha es un trabajo artesanal que apenas ha variado con el correr de los siglos. Para obtener aceites de oliva de buena calidad la aceituna debe procesarse en las 24 horas siguientes a su recogida.
Alejandro Bengolea y Valeria Bonanno, dueños de Lote 8.
Según Alejandro rodearse de gente de confianza, fundamental para llevar a cabo un buen proyecto, y luego asesorarse con colegas que ya hubieran dado sus primeros pasos en emprendimientos similares olivo fue lo que le posibilito la puesta en marcha del proyecto, el cual hoy se encuentra en pleno crecimiento.
El objetivo de Lote 8 es posicionar su producto junto a marcas de aceite de oliva extra virgen de Napa Valley, La Toscana y Provençe. Alejandro Bengolea tiene planeado un viaje de negocios a Provençe, donde espera aprender del modelo de negocio de allí para poder aplicarlo a su emprendimiento.
El gran desafío es encontrar un nicho de mercado que valore una marca Premium de aceite de oliva, para eso debo construir todo lo necesario para crear la marca.
Los dueños de Lote 8, de Argentina, veraneaban en Punta del Este hasta que decidieron quedarse en Uruguay y apostar a un nuevo proyecto de negocios. En el año 2007 acudieron a Caldeyro Victorica Bienes Raíces por asesoramiento profesional y así encontrar una propiedad rural que se adecuara a sus necesidades. Primero acudieron al sitio web para ver las propiedades disponibles. Alejandro nos cuenta que fue el profesionalismo y cordialidad lo que hizo confiar en nosotros. A partir de ese momento Alejandro Bengolea y familia entablaron con Caldeyro Victorica Bienes Raíces una relación de negocios y amistad que continua hasta el día de hoy.
